La ubicación es perfecta, justo junto al puerto deportivo. El spa es espectacular y me ayudó a relajarme después de un largo día. Además, disfruté del desayuno buffet, lleno de opciones locales y delicioso pescado. La piscina en la azotea también es un gran punto a favor para disfrutar de un atardecer.

Lo recomendaría.

La habitación y el baño, grandes y cómodos, se disfrutan de vistas al mar realmente bonitas. El desayuno sobresale, es sencillamente espectacular, con una variedad impresionante que vale la pena probar.

El hotel parece un poco desactualizado, con habitaciones que tienen un aire antiguo y pueden sentirse un poco pequeñas. La falta de mantenimiento se notó, ya que en diez días no pasaron el aspirador en la moqueta de la habitación, lo que puede ser un inconveniente. Además, el ruido del tráfico y de los pasillos puede resultar un poco molesto, especialmente durante los fines de semana, así que si buscas tranquilidad, podría no ser el lugar ideal.

La vista desde la piscina en la azotea fue espectacular, y el desayuno siempre incluía opciones frescas y deliciosas. Agradezco la atención especial que recibí de Joy, su sonrisa hizo la diferencia.

Desayuno espectacular y vista al mar

Tuve una estadía maravillosa, disfrutando de un desayuno que incluyó opciones frescas y deliciosas, realmente un deleite. La vista desde mi habitación era impresionante, especialmente los atardeceres sobre el mar. Sin embargo, algunos detalles del hotel podrían mejorar en cuanto a mantenimiento para hacer la experiencia aún más placentera.

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Cómoda habitación, delicioso desayuno, con acceso a la playa y a un gimnasio moderno que mejoró mi experiencia durante la estancia.

No se me ocurre nada

La ubicación frente a la playa brinda una experiencia espectacular. El desayuno es un verdadero deleite, con opciones frescas y variadas que lo hacen inolvidable. Sin embargo, algunas áreas necesitaban de mantenimiento y se notaba un poco de ruido del exterior en la habitación. La piscina en la terraza, aunque impresionante, también estaba algo concurrida durante mi estancia.

La vista desde mi habitación era impresionante, especialmente los atardeceres sobre el mar. Sin embargo, noté que algunas áreas del hotel necesitaban mantenimiento. La piscina en la terraza fue una gran experiencia y el desayuno ofrecía opciones frescas y deliciosas. El happy hour en el bar junto a la playa fue un buen toque.